El fuego rugía con rabia y la noche iba creando el ambiente perfecto.
Miles de oídos se avecinaban mientras otros tantos miles de ojos miraban distraídos.
L luna parecía asomarse entre la bruma para poder estar presente en la velada.
La oscuridad iba invadiendo el lugar mientras la luz de las llamas nos hablaban de misterio y de magia.
Todo estaba preparado y todo empezó cuando en el aíre se divisaron tres palabras mágicas inconfundibles:
HABÍA UNA VEZ…
Las palabras bailaban en el viento mientras la gente iba escogiendo aquellas que más
le emocionaban:
Conejo
Hormiga
Luna
Corazón
Alegría
Pasión
En aquel momento determinado, cuando las palabras brillaban enloquecidas, vi como las personas allí reunidas iban guardando cuanta palabra podía en sus bolsillos.
Iban repletos de palabras.
Eran decenas de ellas.
GRANDES
pequeñas
pero todas
I M P O R T A N T E S
El final del baile llegó y , con ello, los regalos.
Muchas Sonrisas.
Después la muchedumbre fue desapareciendo asiendo fuertemente palabras que juguetonas luchaban por revolotear en el viento.
Colorín colorado este cuento se ha acabado.
Hasta el próximo. (!Claro está!)Catherine Dussault
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